Palabras de inauguración de José Manuel Salazar-Xirinachs, Secretario Ejecutivo de la CEPAL.

• Estimado Luis Mateos Paramio, Encargado de Negocios ad interim de la Embajada de España en Chile;
• Estimada Javiera Martínez, Directora de Presupuestos del Ministerio de Hacienda de Chile
• Estimadas Ministras/Ministros, Viceministras/Viceministros, y autoridades hacendarias de los países de América Latina y el Caribe;
• Estimados representantes de organismos internacionales, bancos de desarrollo, especialistas de la academia y sociedad civil;
• Colegas de la CEPAL y del sistema de las Naciones Unidas en Chile.

Nuestra más cordial bienvenida a la sede de la CEPAL. 

Agradecemos profundamente la participación de las autoridades hacendarias presentes, a los representantes de organismos internacionales, de la academia, de centros de investigación, de sociedad civil y del sector privado. 

Gracias a su apoyo y participación estamos celebrando 37 años de este Seminario, lo que lo convierte en un referente regional para el diálogo sobre los retos fiscales y macroeconómicos que enfrentamos. 

Este Seminario es un ejemplo claro del papel que juega la CEPAL y el Sistema de Naciones Unidas en ofrecer a la región espacios de encuentro e intercambio entre distintos actores involucrados en el quehacer público, motivados por la búsqueda de soluciones a los problemas de sus países y de la región.

Sabemos que cada país tiene sus especificidades, pero también sabemos que hay problemas comunes. Con los cambios actuales en la globalización y la geopolítica, y con la necesidad de influir en la reforma de las arquitecturas de cooperación internacional, incluyendo la arquitectura financiera internacional, se puede argumentar que es más importante que nunca comparar notas y desarrollar visiones comunes.

Desde esta perspectiva global, se pone en relieve la importancia de elaborar productos de conocimiento regional que sean de utilidad para los países y para la sociedad en general, tales como el Panorama Fiscal de América Latina y el Caribe que estaremos presentando en la siguiente sesión.

Desde la CEPAL hemos venido insistiendo en que América Latina y el Caribe se encuentra ante una crisis de desarrollo, caracterizada por tres trampas del desarrollo: una de baja capacidad para crecer y transformar; una de alta desigualdad, baja movilidad social y débil cohesión social, y una tercera trampa de bajas capacidades institucionales y débil gobernanza.

Esa primera trampa de baja capacidad para crecer es una de las causas del reducido espacio fiscal que también caracteriza a la mayoría de países de la región, además de sus altos niveles de endeudamento y el costo creciente del servicio de la deuda.

La combinación entre la baja capacidad para crecer y el limitado espacio fiscal es una combinación tóxica para enfrentar los desafíos y transformaciones necesarias, tales como elevar la inversión pública y privada, mejorar la productividad e  impulsar las transformaciones sociales y productivas que nos permitan superar las trampas y brechas del desarrollo que enfrentamos. 

En otras palabras: el espacio fiscal limitado, los déficits persistentes, el alto nivel de endeudamiento público, el encarecimiento de la deuda, todas estas condiciones conspiran contra la capacidad de nuestros países de usar la política fiscal como una herramienta para el desarrollo. 

En esta materia hay una gran injusticia de alguna manera impuesta sobre nuestra región por las realidades de la economía internacional. Me refiero a que con pocas excepciones los países de  América Latina y el Caribe, aprendieron la lección e hicieron la tarea de la estabilidad macroeconómica y la disciplina fiscal. Estábamos con datos de deuda relativamente sanos antes de la pandemia 

Pero en este momento estamos puestos en una situación en donde la realidad fiscal atenta cada vez más contra nuestras aspiraciones legítimas de desarrollo y se nos hace muy difícil tener el espacio fiscal para hacer la inversiones en salud, educación, infraestructura, transformación productiva que requerimos para dinamizar el crecimiento y los mercados laborales, reducir pobreza e informalidad así como la desigualdad. 

Y no estoy hablando desde una posición ideológica sobre ortodoxia o heterodoxia macroeconómica, sino desde el más elemental pragmatismo y sentido común. Más que “debt distress” lo que nuestros países sufren es de “developmental distress”. Y por eso la posibilidad de tener resultados en la Reunión sobre Financiamiento del Desarrollo en Sevilla es tan importante. Por eso es tan importante la conversation internacional sobre la reforma de la arquitectura financiera internacional. Desafortunadamente, las realidades geopolíticas no auguran muy bien sobre resultados con el nivel de ambición necesarios. Pero hacia esos resultados es hacia lo que los países de la región deberían no solo aspirar sino trabajar juntos.

Permítanme detenerme en la magnitud y los impactos del creciente peso del pago de intereses de la deuda: el aumento de las tasas de interés de referencia internacionales —así como de los mercados internos— contribuyó en 2024 a que los pagos de deuda aumentaran, en algunos casos, hasta 0,5 puntos porcentuales en comparación con el año anterior, lo que reduce la disponibilidad de recursos públicos para gastos prioritarios que permitan reducir brechas sociales y dinamizar el crecimiento económico.

Ante esta realidad, se vuelve cada vez más importante impulsar soluciones en conjunto para ampliar el espacio fiscal y orientar el uso de las herramientas de la política fiscal de forma estratégica y eficiente.

En este sentido, este Seminario en una oportunidad importante en un momento aupicioso, porque el Seminario abordará temáticas fiscales prioritarias y urgentes. 

El diálogo con las autoridades y organismos internacionales que nos acompañan brindará una orientación sobre los principales retos fiscales que enfrentamos como región ante un contexto de bajo crecimiento, alta incertidumbre y elevado endeudamiento. 

Tendremos sesiones sobre política tributaria. Primero con el lanzamiento del  informe Estadísticas Tributarias en América Latina y el Caribe 2025, que es el informe de referencia de comparativos tributarios en la región, y que elaboramos en conjunto con la OCDE, el BID y el CIAT. Esta colaboración interinstitucional es una muestra de la importancia de potenciar nuestras capacidades institucionales para elaborar productos de conocimiento regional de utilidad para nuestros países. 

Tendremos también una sesión para analizar cómo aprovechar la política tributaria para reducir la desigualdad y fomentar la sostenibilidad ambiental. 

Un tema de suma importancia que no podía faltar en este Seminario es cómo dar una orientación estratégica al gasto público y a la inversión para reducir brechas estructurales. 

Y finalmente, abordaremos también la necesidad de movilizar financiamiento para ampliar el espacio fiscal. La Cuarta Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo, que se celebrará en Sevilla (España), del 30 de junio al 3 de julio de 2025, representa una oportunidad clave para forjar acuerdos que mejoren la arquitectura financiera internacional para hacerla más eficaz en apoyar los esfuerzos de los países por ampliar su espacio fiscal y fomentar las inversiones económicas, sociales y ambientales necesarias, tanto públicas como privadas.

Como podrán ver, tenemos dos días de mucho trabajo y ver esta Sala Raúl Prebisch llena nos da energía y motivación para hacer que este Seminario sea exitoso. 

De nuevo, nuestra más cordial bienvenida otro año más a la CEPAL, que es su casa, y les deseo un Seminario muy productivo.

Muchas gracias.